Para permitir la precisión y eficiencia de la grabación magnética asistida por calor (HAMR, por sus siglas en inglés), el embudo fotónico canaliza con precisión la luz láser directamente a la antena cuántica.
Su diseño, que involucra ciencia de materiales avanzada y técnicas de nanofabricación, limita la trayectoria del láser para conservar la integridad y la potencia del haz a medida que avanza hacia su objetivo. Los materiales elegidos tienen un alto índice de refracción para guiar la luz de manera eficiente con una mínima dispersión o pérdida.