El concepto de realizar copias de seguridad de datos importantes ha existido desde el principio de los tiempos. A los humanos les encanta registrar las cosas. En general, los humanos también son optimistas. Asumimos que lo que registramos perdurará. Desde el tallado de figuras en piedras hasta los garabatos en pergaminos y la impresión en papel, el objetivo siempre ha sido pasar las ideas de nuestra cabeza a algo un poco más permanente porque “¡posiblemente alguien necesite esto después!”.
Ahora, avancemos en el tiempo. Computadoras, teléfonos, cámaras, unidades de disco duro, unidades de estado sólido, centros de datos en el fondo del océano: gracias a nuestro ingenio, nuestros métodos de grabación han cambiado mucho. Tan solo en las últimas décadas, han aparecido múltiples formatos nuevos de medios. Algunos han durado. La mayoría, no. Uno que ha perdurado es la cinta, o más específicamente la cinta magnética. O, más específicamente, la cinta LTO (cinta lineal-abierta)
La grabación de datos en cinta ha sido una práctica comercial común desde mediados del siglo XX, cuando las computadoras eran lo suficientemente grandes como para llenar una habitación. Con el tiempo, el uso de cintas para copias de seguridad se convirtió en un elemento central de las estrategias de recuperación ante desastres y de almacenamiento a largo plazo. E incluso hoy, los clientes aprecian las capacidades de separación de aire de la cinta y su costo de almacenamiento relativamente bajo a través de instalaciones de archivo externas, a veces de terceros.
Sin duda, la cinta ha tenido una buena y larga trayectoria. De hecho, probablemente no desaparezca, al menos en algunas décadas más. Pero las estrategias de almacenamiento en cinta seguramente cambiarán para muchas empresas conforme avanzamos hacia el futuro. Probablemente, la mayoría de los cargadores automáticos y bibliotecas de una sola cinta y cintas pequeñas transicionen a otras tecnologías a medida que los costos de esas alternativas se reduzcan. Algunos centros de datos optarán por archivar sus datos fríos en una biblioteca de cintas gigantes con decenas de miles de ranuras de medios, siempre que la adquisición de cintas siga siendo asequible y la migración de datos o medios siga siendo fácil.
Así como han evolucionado las diferentes formas de medios grabables, también lo han hecho las estrategias de copia de seguridad de datos. Ahora estamos en la era de la nube. Quizás algo sorprendente es que todavía hay "habitaciones" llenas de computadoras, pero son centros de datos en la nube con cantidades masivas de almacenamiento y poder de procesamiento. El almacenamiento basado en la nube ha demostrado sus beneficios tanto en la recuperación ante desastres como en el archivado de datos durante varias décadas. Las organizaciones que han adoptado únicamente una estrategia basada en LTO tienen varias razones para considerar la posibilidad de migrar sus datos valiosos a la nube o, al menos, utilizar el almacenamiento basado en la nube junto con la cinta.
